La Asociación de Economía de la Salud (AES) elaboró en 2008 un documento
 de diagnóstico del Sistema Nacional de Salud (SNS) a partir de las 
aportaciones realizadas por varios de sus socios, con el objetivo de 
contribuir al debate que precedería a un eventual Pacto por la Sanidad. En el complicado lustro transcurrido desde entonces se han 
sucedido numerosos cambios regulatorios que pueden cambiar la 
estructura, el funcionamiento y el contenido del SNS, tal y como lo 
hemos conocido hasta el momento. La crisis económica que nos acompaña 
desde que viera la luz el documento de síntesis antes aludido se invoca 
constantemente como justificación para reducir las dotaciones 
presupuestarias autonómicas destinadas a la sanidad y se apela 
constantemente a la necesidad de incrementar la eficiencia del sistema 
sanitario público.
En este contexto tan diferente, la Junta Directiva de AES 
consideró necesario elaborar un nuevo documento que, sobre 
una base objetiva y atendiendo a parámetros científicos, volviera a 
tomar el pulso del SNS, valorara los cambios introducidos por 
iniciativas legislativas recientes y propusiera medidas de reforma 
fundamentadas en los análisis de la economía de la salud. El trabajo se presentó a los medios en diciembre, y a partir
 de esa fecha se estan exponiendo los distintos capítulos de manera 
permanente y en abierto en la web de AES, siguiendo un calendario que culminará el  próximo 21 de enero.
Paralelamente se viene publicando en "Nada es gratis" (http://www.fedeablogs.net/economia/) una serie de cuatro
 post,  aportando un diagnóstico 
independiente y un conjunto de propuestas de soluciones de los 
principales problemas del sector. El detalle de dicho diagnóstico y 
propuestas remite a la web de la asociación (www.aes.es). 
Para facilitar al tiempo la digestión y la continuidad de la lectura, entre esta semana y la próxima reproducimos aqui dichos textos, recordando que se invita tanto a los socios de AES  como a personas sin vinculación con la 
Asociación a leer su contenido y a realizar sus propias aportaciones y 
recomendaciones a través del buzón de sugerencias de AES, que se 
encuentra en la dirección http://www.aes.es/sugerencias.php.  
                  
                    
La primera entrega, introductoria, corre a cargo de Marta Trapero y Juan Oliva, presidenta y ex-presidente de la Asociación de Economía de la Salud:
                    
Sistema Nacional de Salud: diagnóstico y propuestas de avance.Marta Trapero-Bertran y Juan Oliva
http://www.fedeablogs.net/economia/?p=34186
La salud es uno de los pilares donde se apoya el bienestar de los 
individuos y las sociedades. Desde la perspectiva individual, aunque 
disfrutar de buena salud no es condición suficiente para alcanzar o 
mantener un alto grado de bienestar, en términos generales, es condición
 necesaria como lo muestran distintos estudios sobre salud, felicidad y satisfacción de
 los individuos realizados en los últimos años. El importante volumen de
 recursos invertidos por países de nuestro entorno y el nuestro propio 
en medidas de carácter preventivo y tratamientos sanitarios que tratan 
de evitar o paliar, en la medida de lo posible, el dolor y el 
sufrimiento que ocasionan las enfermedades y los problemas de salud es, 
sin duda, reflejo del grado de prioridad que concedemos como sociedad a 
la protección de la salud.
La sanidad es el servicio público más utilizado y valorado
 por los ciudadanos y el que consideran que más justifica los impuestos 
que pagan. Ahora bien, al mismo tiempo los ciudadanos también 
manifiestan que es aquel del cual se hace peor uso y el que tiene mayor 
margen de mejora. Ello es congruente con la identificación de rigideces y
 problemas de adaptación del sistema a un entorno que ha cambiado 
sustantivamente, y en el cual la negativa en el pasado a acometer 
reformas compromete seriamente su capacidad para responder a cambios 
demográficos, tecnológicos y sociales, en suma, su solvencia en los años
 próximos.
La Junta Directiva de la Asociación de Economía de la Salud (AES),[1]
 ha invitado a socios de AES con reconocida experiencia en diferentes 
áreas a tomar el pulso del SNS, a valorar los cambios introducidos por 
iniciativas legislativas recientes, y a proponer medidas de reforma 
fundamentadas en los análisis de la economía de la salud. La reflexión, 
fundamentada en pruebas y bibliografía contrastadas, se articula sobre 
cuatro grandes ejes: la financiación y la cobertura pública; la 
organización de la asistencia sanitaria;  las políticas de salud; y  el 
buen gobierno de la sanidad.
El punto de partida es reconocer que el Sistema Nacional de Salud 
(SNS) está siendo uno de los estabilizadores sociales clave en España 
para que la crisis económica no derive en una crisis social de gran 
magnitud. El que los ciudadanos tuvieran acceso, hasta hace poco tiempo,
 prácticamente universal a la sanidad pública es un logro y un derecho, 
pero además es un elemento de desarrollo, progreso, crecimiento, 
cohesión social y de protección de la salud que está mostrando todo su 
valor en los momentos más duros de esta larga crisis.
El contrato social establecido entre los ciudadanos y sus 
representantes y entre los profesionales sanitarios y sus pacientes es 
sólido y cualquier duda sobre él debería exponerse a un intenso debate 
social. Ello no implica que el sistema sea inmutable y que no pueda 
estar sujeto a cambios. En un contexto de ingresos públicos reducidos y 
con escaso o nulo margen para incrementar la deuda, un imperativo del 
que será difícil escapar es lograr un mejor desempeño con menos 
recursos. Pero ello no será posible si continuamos aplicando los mismos 
criterios con menos recursos. Menos de la misma manera conllevará
 indefectiblemente una erosión en la calidad del sistema y en nuestras 
condiciones de salud. Por ello, se necesitan nuevas reglas y prácticas 
que afronten los problemas presentes y los retos futuros que aguardan al
 SNS.
La solvencia del SNS y la posibilidad de desarrollar políticas de 
salud intersectoriales que amortigüen los efectos de la crisis económica
 sobre la salud de los ciudadanos pasarán necesariamente por conjugar la
 gestión eficiente de los recursos y la mejora simultánea de la equidad 
de las políticas implantadas. Para ello, condiciones necesarias, aunque 
no suficientes, serán apoyarnos en las fortalezas de nuestro sistema, 
pero también eliminar bolsas de ineficiencia, aprender de experiencias 
ajenas aplicándolas con inteligencia y realismo en nuestro medio, apelar
 al liderazgo y compromiso de los profesionales sanitarios y favorecer 
la participación ciudadana, tomar decisiones informadas y cultivar la 
evaluación de nuestras políticas.
Estos y otros temas serán expuestos a lo largo de las próximas 
semanas en una serie de posts, que comenzará el próximo 10 de diciembre 
coincidiendo con la presentación del informe. Asimismo, para los 
lectores interesados en la obra completa, el trabajo se expondrá de 
manera permanente y en abierto en la página web de AES (http://www.aes.es).
La publicación de este documento no agota su recorrido puesto que no 
puede considerarse en ningún caso como una obra acabada, sino como una 
primera versión de un documento de trabajo orientado a alentar un debate
 razonado y abierto con participación de expertos, personas interesadas y
 ciudadanía, en general. Debate dinámico y flexible en función de los 
avances en el conocimiento y de la situación económica y social, con 
cabida a opiniones dispares dado la multiplicidad de posicionamientos e 
intereses de los distintos agentes implicados, pero siempre dentro del 
marco de la reflexión y discusión razonada, basada en el respeto y 
fundamentada en el conocimiento.
Esperamos que lo disfruten y participen del mismo
Marta Trapero-Bertran y Juan Oliva son, respectivamente, Presidenta y ex-Presidente de la Asociación de Economía de la Salud
[1]
 Entre los fines de AES se encuentra: (a) el contribuir a la mejora de 
la salud y de los servicios de atención sanitaria para el conjunto de la
 población, a través de las aportaciones del conocimiento científico; 
(b) el impulsar el debate en torno a alternativas que persigan la 
eficiencia y equidad en los sistemas de salud, para que repercutan en el
 bienestar general de la sociedad y favorezcan la sostenibilidad del 
sistema; (c) el promover el buen gobierno de los sistemas de salud, 
potenciando el desarrollo efectivo de las políticas de salud y la 
rendición de cuentas a la sociedad; y, (d) fomentar una cultura de 
evaluación en el conjunto de los sistemas de salud, abarcando desde el 
nivel de las políticas a la gestión clínica, entre otros.
 


